El ser humano no es el único animal al que le huelen los pies. De hecho, hay uno al que no solo le huelen, sino que gracias a ellos puede comunicarse. ¿Quieres saber de cuál se trata? ¡Sigue leyendo!
El estudio
Según un estudio publicado en la revista ‘Scientific Reports’, los osos pardos tienen unas glándulas situadas en las plantas de los pies que segregan unas sustancias químicas que proporcionan información sobre el individuo que ha pasado por una zona concreta.
Estas glándulas sudoríparas y sebáceas segregan 26 compuestos químicos diferentes que les permiten comunicarse con otros individuos de su especie.
¿Por qué lo hacen?
«Los osos son animales que pasan la mayor parte del tiempo solos y, sin embargo, comparten espacio con otros individuos. Necesitan saber si hay congéneres en su territorio, si hay machos rivales, otros ejemplares con quien aparearse o saber si algún macho puede suponer una amenaza para sus crías”, explica Agnieszka Sergiel, del Instituto de Conservación Natural de Polonia.