Si tienes gato, seguramente hayas observado que se apodera de todas las cajas de cartón que tiene a su alcance. Y no es el único, pues a la gran mayoría de los gatos les encanta esconderse en su interior. ¿Quieres saber el porqué de esta extraña afición? ¡Sigue leyendo!
El refugio ideal
Aunque pueda parecerte mentira, una simple caja de cartón es el refugio perfecto para estos felinos. Los gatos son bastante independientes, por lo que adoran los ratos de soledad. Nada mejor que una caja para esconderse y evitar ser molestados.
Todo ello tiene mucho que ver con su instinto salvaje. Al esconderse, los mininos reducen enormemente sus posibilidades de ser cazados por sus depredadores. Esto les proporciona una inmensa tranquilidad, lo que mejora su bienestar físico y mental.
Un buen juguete
A los gatos les encanta arañar texturas, y el cartón es perfecto para ello. Les vuelve locos rasgar este material con sus uñas, lo que les ayuda a desestresarse y a afilar sus ‘garras’.
Además, se divierten ocultándose para salir a ‘cazarnos’ en el momento más inesperado. ¿Y qué mejor que una caja para ello?
Máxima comodidad
Independientemente de todo esto, no podemos olvidar que las cajas de cartón son realmente cómodas para estos peludos. El cartón retiene muy bien el calor, por lo que estas cajas pueden ser el sitio idóneo para echar la siesta.
Punto de observación
Las cajas son ideales para ver sin ser visto. Los mininos las usan a menudo como zonas de observación, pues les basta con asomarse mínimamente para controlar lo que ocurre a su alrededor sin exponerse a posibles peligros.
Por todos estos motivos, te aconsejamos que coloques una caja de cartón en una zona cálida de la casa, pongas una manta suave en el fondo y dejes que tu pequeño pase dentro de ella todo el tiempo que quiera. Nada más fácil y efectivo para hacer a tu gato plenamente feliz.
