Al igual que los seres humanos, los animales necesitan dormir para reponer sus energías y descansar. Sin embargo, los hábitos de sueño son diferentes entre las especies animales.
La ballena, por ejemplo, puede dormir manteniendo uno de los hemisferios de su cerebro en alerta. Algo similar sucede con las aves, algunas de ellas pueden descansar en pleno vuelo e incluso hay animales como los flamencos, los elefantes o los caballos que duermen de pie. ¿Increíble verdad? Pues esto no es todo.
Hay animales que pueden permanecer varias semanas sin dormir como es el caso de las jirafas. Esto se explica por el instinto de supervivencia, al ser un animal muy vulnerable a los ataques de sus depredadores no duerme hasta que la situación se lo permite.
Aunque, sin duda, las más adorables a la hora de dormir son las nutrias de mar quienes descansan tomadas de la mano para no separarse.
Y si alguien se lleva el título al ‘más perezoso’ es el murciélago café con 20 horas al día de sueño, a éste se le acerca el koala con 14,5 horas y tras ellos, el animal doméstico por excelencia: el perro, que duerme unas 13 horas al día.
Sin embargo, si pensabas que el perezoso es el ‘más dormilón’ debido a la relación que guarda con su nombre… no es así. Este animal duerme unas 9 horas al día en su hábitat natural.