Seguramente hayas escuchado en más de una ocasión que el heno no puede faltar en la dieta del conejo. Pero, ¿por qué es tan importante? No sólo proporciona los nutrientes necesarios, también cuenta con muchos otros beneficios que te explicamos a continuación.
Favorece la buena digestión
El heno es rico en fibra, lo que favorece el adecuado funcionamiento del tracto digestivo del conejo. Esto es esencial para su organismo, ya que si su sistema digestivo no tuviera la suficiente actividad, sufriría estreñimiento, diarrea y acumulación de gases. Estos problemas podrían causar la muerte del pequeño.
Alto valor nutritivo
Este alimento proporciona una alta cantidad de nutrientes, vitaminas y minerales al animal. Sin embargo, para que esto sea así debe ser un heno de buena calidad y adaptado a las necesidades del conejo, teniendo en cuenta su raza, tamaño y edad.
Desgaste dental
Los dientes del conejo no dejan de crecer durante toda su vida. Por ello necesitan lijarlos y la única forma de hacerlo es masticando heno, ya que ni la madera ni ningún otro material son adecuados para ello.
Debemos insistir en la importancia de todo esto, ya que un sobrecrecimiento de los dientes ocasiona heridas graves, dolor, infecciones, problemas gastrointestinales e incluso la muerte.
Distracción
Al igual que los perros necesitan pasear para mantener su mente equilibrada, los conejos tienen que roer para desgastar su exceso de energía. Si no tienen a su disposición heno para ello, usarán sus dientes para mordisquear todo lo que encuentren a su alrededor e incluso para arrancarse su propio pelo.
¿Qué tipo de heno escoger?
Existen varios tipos de heno: de alfalfa, avena, pasto, etc. Lo ideal es proporcionarle uno u otro en función de las características individuales del animal, como su edad, raza o estado de salud. Para elegir el mejor modelo, lo mejor es consultarlo con el veterinario.
Por otro lado, no olvides que el pequeño debe tener siempre heno a su disposición y que éste ha de suponer más del 75% de su dieta. Además, hay que guardarlo en un sitio seco y fresco para que conserve todos sus nutrientes.
