La leucopenia es una de las enfermedades más graves a las que puede enfrentarse un gato. Produce una fuerte disminución de glóbulos blancos o leucocitos, lo que debilita su organismo, dando lugar a importantes problemas que incluso pueden acabar con la vida del animal.
¿Qué es la leucopenia felina?
La leucopenia es una enfermedad que ocasiona una fuerte y repentina disminución de glóbulos blancos en el organismo del gato, encargados de combatir los microorganismos. Esto supone un gran problema, pues el animal pierde sus defensas y se vuelve muy vulnerable al ataque de virus y bacterias.
Esta afección es transmitida por un parvovirus que ataca al sistema digestivo y a la médula ósea, y se contagia mediante las deposiciones, orina, saliva y sangre de otros animales infectados. También compartiendo bebedero y comedero.
Síntomas principales
Al tratarse de una enfermedad que afecta directamente a los glóbulos blancos, puede manifestarse de muchas maneras. Entre los síntomas más frecuentes encontramos:
1. Apatía.
2. Vómitos.
3. Diarreas.
4. Fiebre.
5. Inflamación de los ganglios linfáticos.
6. Pérdida de peso.
7. Pérdida de pelaje.
8. Dolores musculares y articulares.
9. Abdomen hinchado.
10. Dificultades respiratorias.
Tratamiento
A día de hoy no existe cura para la leucopenia felina, por lo que el único tratamiento consiste en aliviar los síntomas. Todo depende del estado de la enfermedad. Por lo general se administran antibióticos de por vida para controlar el problema, aunque a veces es necesaria la hospitalización y las transfusiones de sangre.