¡Cuidado! Esta plaga de orugas, muy extendida en el litoral mediterráneo, puede ser letal para tu animal de compañía. De hecho, si tu perro o gato olisquea a uno de estos gusanos, puede sufrir importantes reacciones.
Dónde encontrarla
La oruga del pino, más conocida como procesionaria, es un lepidóptero muy abundante de los pinares mediterráneos durante esta época del año. Este gusano es fácilmente reconocible porque se desplaza en grupo de forma alineada, a modo de procesión.
Toxicidad
Cada procesionaria dispone de unos 500.000 pelos extremadamente tóxicos a lo largo de su cuerpo que se desprenden con mucha facilidad. El contacto con estos pequeños dardos supone un grave riesgo para quienes se acercan. Y no sólo por contacto, sino también mediante vía aérea, pues se trasladan por el aire a través de las corrientes de viento.
La reacción por contacto con esta oruga produce al animal urticaria e inflamación en la zona afectada. De hecho, su toxicidad es tan alta que si no se trata de inmediato puede terminar con la vida de la mascota.
Cómo actuar
Si ves que tu animal de compañía empieza a rascarse la boca, saliva mucho y tiene problemas para respirar, está sufriendo un shock alérgico. Por ello, lo primero que debes hacer es lavar abundantemente su boca y lengua con agua. También puedes suministrarle una inyección de Urbason en la zona afectada. De todos modos, estas precauciones sólo sirven para ganar tiempo, inmediatamente después deberás acudir al veterinario lo más rápido posible.
