Stephan, el oso domesticado

Este matrimonio ruso no se conforma con tener un perro o un gato como mascota y vive con un animal un tanto peculiar. El animal de compañía en cuestión se llama Stephan y es un ejemplar de oso pardo de 23 años que mide 2,1 metros de alto y pesa 135 kilogramos. ¿Quieres saber más? Sigue leyendo.

De la libertad al cautiverio
Stephan deambulaba por el bosque en muy mal estado cuando Svetlana y Yuriy Panteleenko, un matrimonio ruso, decidió rescatarlo. El animal, de tan solo tres meses de edad, acababa de perder a su madre y se encontraba desorientado.

Inicialmente, el matrimonio decidió acogerle en su casa por unos días hasta que el animal sanase, pero tras su recuperación nació una bonita relación que les impidió desprenderse de él y lo adoptaron como mascota.

Un miembro más de la familia
Según ha explicado la familia Panteleenko al diario británico Metro, Stephan actúa como uno más de la familia tras haberse criado con ellos desde cachorro. “Él ama a la gente y es un oso muy amable. Nunca nos ha mordido y le encantan los abrazos”, explica su dueña.

En este vídeo subido a Youtube por el matrimonio se puede ver cómo es la convivencia de esta peculiar familia.

Tal y como se puede ver en el vídeo, el oso se sienta en la mesa a la hora de la comida, juega con sus padres adoptivos a la pelota, pide mimos como si fuera un gato más y hasta cuenta con su propia habitación en la casa.

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